Una familia de pueblo llega a Madrid ilusionada con la vida mejor y más cómoda de la capital. Las colocaciones están mal y, además, sólo saben hacer las faenas del campo. El marido tiene que esforzarse pero no consigue más que vivir cada vez peor. De un buen piso con unos parientes terminan en una habitación inmunda. La solución la encuentran poniéndose el marido a 'servir' , pero lo hace tan bien que decide seguir en esa profesión.