Durante una tormenta histórica, Jill y Andy encuentran a la familia de sus sueños: Meredith y Brad, y a sus tres hijos. Para ello ni siquiera tienen que salir de su apartamento. Meredith es tan irreverente como Jill y Brad tan poco pretencioso como Andy, y sus hijos se llevan a la perfección. Son la pareja perfecta... o tal vez no.