Kaori y Akira se encuentran con Natsuno, quien les muestra las marcas de mordeduras en su cuello y les dice que abandonen el pueblo, temiendo que sean atacados. Pero Akira y Kaori se niegan a hacerlo. Al darse cuenta de que no escucharán, Natsuno les dice que se mantengan alejados de él diciendo que la próxima vez que lo vean, ya no será él mismo.